La Mujer, como vaso de Oro

                                          


2° TIMOTEO 2:20 “En una casa grande no solo hay vasos de oro y de plata, si no de madera y de barro, unos para usos mas nobles y otros para usos mas bajos. Si alguien se mantiene limpio llegará a ser  un vaso noble santificado útil para el Señor y preparado para toda buena obra.”
Las mujeres hemos sido creadas para ser exitosas en todo lo que nuestro corazón pueda desear y nuestra mente pueda concebir.

Algunas mujeres se preparan desde muy jóvenes, otras a una edad madura, lo importante es que cuando estás convencida de lo que quieres y hacia donde te diriges, tengas la certeza de que lo lograrás, siempre y cuando seas una mujer integra y tus dones y talentos sirvan para servir a los demás.

Hace poco, conocí a una amiga, en una clase de baile, me pareció que bailaba muy bonito y le pregunté que si había tomado clases antes, ella sorprendida con mi pregunta, me contestó que no, que al contrario ella buscaba los lugares de atrás por que le daba pena hacer la rutina al frente.

Casi no lo podía creer, como alguien más puede ver habilidades que parecen diamantes en nosotras y somos nosotras mismas quienes las escondemos, por incredulidad, por temor, por  inseguridad, por ordinarias, por ignorancia, etc.

Hay una pequeña historia de cuando estaba el apóstol Pedro pescando y Jesús se le acercó cuando el no había pescado nada y le dijo: “voy al mar adentro, métete adentro por que acá en la orilla no pescaste nada, pero ve a las profundidades que ahí vas a descubrir”.

A mis dos hijas les gusta ir de pesca con mi esposo,  las lleva a la orilla de una presa a pescar mojarra para que luego le sirva a él de carnada con peces mas grandes, cuando se mete más adentro. Alguna vez lo escuché decir que los pescados más grandes y bonitos están en lo más profundo del agua.

Cuando una mujer quiere ser extraordinaria tiene que dejar de ser ordinaria.

Las mujeres muchas veces así somos, preferimos quedarnos a la "orilla de todo", por ejemplo;  con tres días a la semana que vaya al gimnasio está bien, queremos tener una figura física bonita pero desde la orilla, sin tratar de comer saludable, sin esforzarme en comprar  alimentos nutritivos, sin tomar el tiempo necesario todos los días para preparar una comida sana, queremos que se cumpla el deseo como por arte de magia, sin pagar el precio, sin profundizar en un aprendizaje de nuestros intereses, buscamos resultados extraordinarios con trabajo ordinario.

Cuando una mujer quiere ser Invencible tiene que dejar de ser Invisible.

Generalmente las mujeres somos de un ánimo innestable, por eso un día queremos comernos el mundo y al otro día ya no queremos hacer nada, por que el entusiasmo de ayer simplemente se fué.

Un día queremos corregir los errores delante de nuestros hijos y al otro día nos mostramos autoritarias diciendo "por que lo mando yo", un día somos una y otro día desaparecemos.

Mira que te mado que te esfuerces y seas valiente, (josué 1:9).

Sinceramente creo que si Dios nos manda esforzarnos y tomar valor, es por que sabe que eso es precisamente lo que nos cuesta mucho trabajo. Cuando nos proponemos algo, generalmente lo dejamos por flojera o por que no lo creemos, nos damos por vencidas antes de tiempo. Nosotras podemos aprender a vencer lo que no nos deja avanzar, hablándolo, creyéndolo y tomando acción sobre nuestros deseos.

Cuando una mujer desea tener Seguridad tiene que dejar de ser Insegura.

La inseguridad viene de un transfondo de rechazo, baja autoestima o temor entre otros. Cuando hemos sufrido algo así, necesitamos acercarnos a nuestro Creador  y veremos que sólo El puede sanar cualquier herida del pasado para transformarnos de vasos de barro a vasos de Oro.

Las mujeres seguras son exitosas por que tienen convicciones profundas, han creído y han puesto sus habilidades al servicio de los demás. Una mujer segura paga el precio que tenga que pagar por los sueños que ha deseado y concebido en su mente, se hace cargo de sus hijos, se hace cargo de ella misma en su bienestar, en su felicidad y no se lo carga a nadie más. Una mujer segura es congruente en lo que dice y en lo que hace por que tiene cuidado de hablar o de hacer promesas que de antemano sabe que no podrá cumplir.

Debemos buscar estar cerca de mujeres exitosas, que van adelante de nosotras, que saben transformar sus experiencias difíciles en momentos y palabras de sabiduría, que constantemente tienen metas de conquista.

Dios no hace acepción de personas, todos los dones que vienen de parte de Dios, están disponibles para todas las mujeres que quieren cuidar su vida como un vaso de oro, empieza a declarar y creer: Soy una mujer extraordinaria preparada para toda buena obra.

Felicidades a todas las Mujeres Bellas por dentro y por fuera!